Quiero compartir con ustedes unos párrafos sobre la lectura del libro “Flujo” de Mihaly Csikszentmihalyi.
Espero que la disfruten.
Ma. Marta
Ante todo les presento al autor del Libro: Fluir (Flow): Una psicología de la felicidad.
Es un famoso profesor de psicología de la Universidad de Claremont (California) y se ha destacado por su trabajo acerca de la felicidad, la creatividad, el bienestar subjetivo y la diversión; pero es aún más famoso por su creación de la idea de Flujo y por el trabajo que ha realizado durante mucho tiempo acerca de ese tema. Ha escrito muchos libros y más de 120 artículos
En su libro nos muestra cómo la psicología, la filosofía y el humanismo se unen para responder a la pregunta fundamental: ¿Qué es la felicidad?
Programados para la creatividad
Cuando se le da una lista a la gente preguntándole acerca de lo que disfrutan hacer más, la respuesta más frecuentemente elegida es el “diseñar o descubrir algo nuevo.
Sin los desafíos, no hay evolución de la cultura, ni progreso en los pensamientos o sentimientos. Así que, es importante entender mejor en qué consiste el placer y cómo la creatividad lo puede producir.
Las personas creativas difieren las unas de las otras en muchos aspectos, pero, en uno son unánimes: todas aman lo que hacen. No es la esperanza de lograr fama o riqueza lo que las conduce; en vez de eso, es la oportunidad de hacer el trabajo que ellas disfrutan haciendo lo que las guía. Debemos asumir que no es lo que ellos hacen lo que cuenta, sino que cómo lo hacen.
¿Qué es el Flujo?
Cierta gente dedica muchas horas a la semana a sus labores sin ningun recompensa de dinero o fama. ¿Por qué continúan haciéndolo?, está claro al hablar con ellos que lo que los mantiene motivados es la calidad de la experiencia que sienten en ese momento. Este sentimiento a menudo incluye esfuerzos dolorosos, riesgosos, que presionan la capacidad de la persona y también incluye un elemento de novedad y descubrimiento.
Yo llamo a esta experiencia Flujo, porque mucha gente –artistas, atletas, científicos, gente común y corriente- han descrito el sentimiento en palabras similares.
El flujo es un estado de conciencia que consume poco esfuerzo aunque es altamente enfocado en el presente , lo cual nos alivia de los temores usuales que causan la depresión y ansiedad de la vida diaria.
Las descripciones sobre el Flujo no varían mucho por cultura, género, o edad; en las entrevistas la gente menciona repetidamente ciertos elementos clave en sus impresiones de esta experiencia placentera:
Pueden darse feedback a ellos mismos, sin tener que esperar a oírlo de los expertos.
La acción y la conciencia están unidas: en la experiencia de cada día, nuestras mentes a menudo están separadas de lo que hacemos. En estado de flujo, nuestra concentración está enfocada en lo que hacemos.
Las distracciones son excluidas de la conciencia: somos consciente sólo de lo que es relevante aquí y ahora.
No hay miedo al fracaso: en el estado de flujo, estamos demasiado envueltos como para estar preocupados por el fracaso.
Se distorsiona el sentido del tiempo: generalmente, en el estado de flujo nos olvidamos del tiempo, y las horas pueden pasar en lo que parecen ser unos pocos minutos
La actividad se vuelve un fin en sí misma: mucho de lo que hacemos no es solamente por placer, sino que para lograr una meta.
Flujo y felicidad
¿Cuál es la relación entre flujo y felicidad?, es tentador concluir que los dos son la misma cosa; sin embargo, la conexión es más compleja. Cuando estamos en flujo, no siempre nos sentimos felices, porque sentimos sólo lo que es relevante para la actividad. La felicidad es una distracción. Es sólo cuando salimos del flujo, al salir de una sesión o en momentos de distracción, que podemos sentirnos felices.
A mayor flujo que experimentemos en la vida diaria, más probable es que nos sintamos felices en general.
El vínculo entre el flujo y la felicidad depende de si la actividad productora de flujo es compleja, si conduce a nuevos desafíos y de esta manera al crecimiento personal y cultural.
El secreto de la felicidad es: Aprender a obtener el flujo de casi todo lo que hacemos, incluyendo el trabajo y las labores familiares. Si casi todo lo que hacemos vale la pena hacerlo por sí mismo, entonces no hay nada desperdiciado en la vida.
El problema es que es más fácil encontrar placer en cosas que son más fáciles, en actividades como el sexo y la violencia que están ya programadas en nuestros genes. Es mucho más difícil aprender a disfrutar el hacer cosas que hemos descubierto recientemente en nuestra evolución –tales como manipular sistemas simbólicos a través de las matemáticas o componer música, a realizar tareas manuales,- y aprender acerca del mundo y nosotros mismos.
Todos los seres humanos tenemos la habilidad para disfrutar casi
todo lo que hacemos; cómo también podemos crear y descubrir algo nuevo al hacerlo. Esta es la razón por la cual la creatividad es tan placentera, no importa donde tenga lugar.
Desarrollando tu creatividad y felicidad
Aquí se nombran unas cuantas sugerencias para incrementar la creatividad y felicidad personal:
Trata de sorprenderte por algo cada día.
Trata de sorprender al menos una persona cada día.
Escribe cada día qué te sorprendió y cómo sorprendiste a los otros.
Cuando algo te parezca interesante, síguelo.
Reconoce que si haces cualquier cosa bien ésta se vuelve placentera.
Para mantener el placer por algo incrementa su complejidad.
Deja tiempo para la reflexión y relajación.
Descubre qué te gusta y qué odias de la vida.
Comienza a hacer más de lo que te gusta y menos de lo que odias.
Descubre una forma de expresar lo que te mueve.
Mira los problemas de todos los puntos de vista posibles.
Ten tantas ideas como sea posible.
Trata de producir ideas originales.